Somos Emoción

de Michèle Schäfer Wynne, el Domingo, 15 de Julio de 2012 a la(s) 11:03 ·

Desde el primer   momento de nuestra existencia en el que somos una mera célula ya sentimos; ante el primer estímulo Sentimos.
Lo primero es la emoción; es desde la emoción que pensamos, y con este  pensamiento -construido desde la emoción que me causó el estímulo que lo creó-  actuamos.
Al mismo tiempo, al nacer y comenzar a vincularnos, cada emoción sentida ante cada estímulo que recibo va estructurando, moldeando la estructura de mi Yo, mi personalidad. Si me quemo jugando a la pelota, el registro que me queda de jugar a la pelota será tan doloroso que cualquier potencialidad de ser un buen jugador de pelota será apagada, reprimida y no seré un buen jugador de pelota hasta tanto  limpie ese registro.
Esta explicación que escuché de Carlos Wernicke en el curso que estoy haciendo en estos días, termina de confirmarme y le da una vuelta de rosca a todo lo que estoy haciendo: desde mi trabajo con mis alumnos y con las maestras, hasta mi vínculo con mis hijos atravesando el trabajo interior propio, más la investigación sobre una nueva herramienta de decodificación de la memoria celular.
Me hizo pensar que  el grado de responsabilidad que tenemos padres y  maestros en el desarrollo de los niños es mucho mayor de lo sospechado.
En el ámbito educativo cobra mayor relevancia aún la creación por parte del docente de un ámbito de contención, buscando por un lado despejar en el alumno todo temor o tensión que restrinja su capacidad de concentración en el aprendizaje, y por otro lado buscando crear una experiencia de aprendizaje afectivamente positiva para cada alumno.
En el vínculo con un hijo, me hace tomar consciencia de la importancia en su crecimiento de la manera en que le hablo, lo miro, lo abrazo, lo reto, lo despierto a la mañana, es decir tomo consciencia de las emociones que le causo cada día.
Con respecto a un trabajo interior propio, me hace comprenderMe, encontrar respuestas a mis sombras, a mis sentimientos y pensamientos más arraigados. Y a su vez, me confirma y termina de orientar el trabajo de investigación que estamos realizando en la técnica de decodificación de la memoria celular.
Seguiré indagando...
:))